La infancia a veces tiene un precio

El rostro de Sanjay perdía color minuto a minuto. El vial conectado a su muñeca no cesaba de transportar sangre al interior de la recreativa, pero ya no podía parar. Estaba a punto de conseguirlo.

El chico hacía saltar al mago de la pantalla, esquivando los ataques de los esqueleto y contraatacando rayos mágicos. Y finalmente, aparece Drekmor, el jefe final.

La pantalla se torna negra y un fatal mensaje aparece: «ERROR DE LECTURA». Juego averiado. Sanjay se desconecta entristecido y piensa en la sangre que iría rumbo a un continente rico, donde los niños no compran diversión con ella.

Este es un microrrelato de 100 palabras para el reto ‘Escribir jugando’ de El Blog de Lídia, correspondiente a la propuesta del mes de Noviembre.

 

7 comentarios en “La infancia a veces tiene un precio

  1. ¡Qué bueno! Me encanta. Es una distopía escalofriante, pero que no se aleja tanto de la realidad, si cambiamos la máquina recreativa por trabajo infantil… 😦 En fin, muy buena participación con moraleja y crítica incluidas. Siempre me haces reflexionar.
    Muchas gracias, Sergio. Un abrazo.

    Le gusta a 2 personas

  2. Pingback: EJ: Creaciones participantes | El Blog de Lídia

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.